Iniciando el año 2017, CAPD decidió nombrar una coordinadora nacional para el programa Luz Verde – Auxilio Educativo, en Colombia. La función de esta persona es orientar y acompañar los procesos en los diferentes departamentos dónde hace presencia el programa.
En Marzo del presente año, la persona nombrada como coordinardora nacional, Rocío Núñez Espinel, visitó al departamento de la Guajira especialmente a las comunidades indígenas Wayuu; para dar orientación y capacitación a la coordinadora departamental y sus facilitadoras. El propósito del programa es garantizar que en estas comunidades los niños y jóvenes continúen en las escuelas en sus procesos de aprendizaje, haciendo seguimiento y acompañamiento comunitario junto con el Club Rotario – Fundación Manos Solidarias, el socio de CAPD en el programa.
Fue muy preocupante, sin embargo encontrar que tuvo que pasar todo un semestre para que las aulas estuvieran abiertas por ausencia del estado, frente a la destitución del gobernador del departamento. La comunidad educativa no abrió sus puertas hasta obtener las garantías mínimas de alimentación y transporte para recibir una educación digna, especialmente en estas comunidades indígenas que tanto lo requieren.
No obstante, en nuestra visita se encontró aulas vacías, pero no descuidadas porque el programa Luz Verde es netamente comunitario, dejando ver que a pesar de los obstáculos seguimos trabajando junto con nuestras comunidades.
En la foto abajo, estuvo reunida la comunidad Wayuu Nueva Esperanza, en la escuela con el mismo nombre, fue especial para mí recibir a un niño que quisiera tomarse la foto en mis brazos, este hecho llevó a que los otros niños tomaran confianza y se acercaran, fue un gesto de cariño.
A continuación, les contaré que encontré en mi visita por la Guajira: Las facilitadoras con la colaboración de la coordinadora, organizan a la comunidad para realizar actividades de embellecimiento a las escuelas.
Se indagó, además a la comunidad sobre, ¿Qué están haciendo ellos para permanecer dentro del programa? El comentario de la profesora de la comunidad de San José: “la coordinadora nos convoca por medio de la facilitadora, nos entrega los materiales para trabajar en la escuela”, “un trabajo fue darle encerramiento a la escuela para evitar que los chivos habiten allí”, “fue muy importante porque los chivos no querían salir de la escuela, y dañaban el piso” “ahora son los niños quienes estudian en las escuelas no los animales”.
Los comentarios de la facilitadora de la comunidad Nueva Esperanza: “hemos estado trabajando en la rosa”. ¿A qué se refiere? “Rosa es un terreno comunitario en el que todos realizamos diferentes siembras y cuando ya está listo para recoger lo repartimos entre todos, esta actividad nos da alegría porque tenemos comida”; “en esta última oportunidad se cocinó para toda la comunidad”.
Los comentarios de la docente de la comunidad Coveñas: “Hasta hace poco, varios de los estudiantes eran enviados por sus padres a la escuela, pero los mismos no asistían, preferían quedarse de camino con los chivos, y aunque se les comentó por mucho tiempo a los padres, no se presentaron cambios; ahora los padres llegan con sus hijos especialmente aquellos, que no asistían”; “ha aumentado el número de padres en las reuniones escolares”, “los alumnos por primera vez tiene su uniforme completo y nuevo”, “los docentes también hemos sido motivados, por todas las ayudas recibidas”.
En la foto abajo, se muestra a la comunidad de Coveñas, trabajando unida para que su escuela y sus alrededores no se vean descuidados, allí todos colaboran los padres, madres e hijos vinculados al programa, porque entienden que todos ganan.
También, con la colaboración del Club Rotario se capacita a un grupo de jóvenes de bachillerato beneficiarios del programa, con el propósito de realizar refuerzo escolar a estudiantes de primaria con necesidades educativas, o con bajo rendimiento académico. Lo interesante es que los estudiantes simultáneamente empezaron a orientar a niños y niñas de primaria en sus respectivas comunidades, sin esperar el inicio de clases.
En las fotos abajo, se muestra la segunda reunión realizada por el Club Rotario y el refuerzo escolar que hacen los jóvenes en sus comunidades tanto en las escuelas como en sus salones de reunión.



El Club Rotario, además reunió libros usados en buen estado y de buena calidad, para hacer entrega a las escuelas con el fin de construir junto con las familias una biblioteca para incentivar a los estudiantes a investigar las tareas. Con la colaboración de los padres y docentes arreglaron y pintaron los estantes para organizar los libros.
Las fotos abajo, muestran la entrega de los elementos a la comunidad dirigida por la coordinadora del departamento, y en la otra foto la alegría de los niños por recibir los libros.


Por otra parte, los 254 estudiantes, tuvieron que esperar muchos meses para recibir el auxilio que brinda el programa y al final la espera terminó y los beneficiarios recibieron los auxilios de acuerdo al rendimiento académico y compromiso con su educación en el año anterior.
El líder y/o la líder en representación de sus comunidades expresaron sus agradecimientos a CAPD y al Club Rotario y sus deseos de continuar motivando a su comunidad a participar. Los mismos coinciden con las familias, en que el programa es una gran oportunidad para sus hijos, comentando: “es la primera vez que mis hijos llevan uniforme a la escuela, y ahora están contentos y nosotros también”.
En la foto abajo, reflejo el orgullo de los niños, al recibir el auxilio educativo.
Finalizo, agradeciendo a cada persona en particular por haberme recibido, por permitirme oír sus apreciaciones sobre el programa Luz Verde, y especialmente por el cariño recibido por los niños. Quedo satisfecha por el compromiso de las personas que dirigen y por quienes hacen posible el fortalecimiento y la cooperación en cada una de las comunidades Wayuu.
Rocío